domingo, 28 de agosto de 2011

No aparece el sol en mi ventana
está quietecito y rojo
peinándose las puntas de sus cabellos a lo lejos.

No puedo saber lo que piensa
solo sé que sus palabras son hilos de fuego
bordados en mi pecho.

No apareció el sol en mi ventana.
Se ocultó. Por hoy.

Soy la luna que espera iluminarse al
caminar mañana
para lelos
para lelos
para leerlos mundos nuestros
y dejar que me regales esos tus rayos-cabellos.

2 comentarios:

Pamela Caballero dijo...

Te respondo con esto

Me he vuelto dependiente a ti a tal extremo
que tu cercanía me enferma y debilita
y las ganas de avanzar de mi te robas;
no puedo decir no si me miras
no puedo decirte que no porque de ti soy adicta
soy una banca vacía que tan solo espera tu visita...

Mr.jeje dijo...

Visita realizada :)